INTRODUCCIÓN-PREÁMBULO

Nuestra Escuela quiere educar evangelizando y evangelizar educando, armonizando así el desarrollo humano y el ideal cristiano. La definición de nuestro carácter propio tiene bastante de utopía, de camino abierto, de profecía… que convoca y compromete a todos los miembros de la comunidad educativa en la tarea de hacerlo realidad.
Nuestro Centro se inserta en un movimiento que educa y evangeliza por medio de la escuela. Así, nuestro ideario o carácter propio es el de las Escuelas Salesianas, que recoge el patrimonio pedagógico de la Familia Salesiana de Don Bosco. Reconocemos el valor de la escuela como ambiente donde el Evangelio ilumina la cultura, integrándose así educación y evangelización. Esta integración hace de nuestra Escuela una alternativa educativa importante en nuestra sociedad plural y democrática.
Toda persona tiene derecho a la educación y la sociedad debe ofrecer los medios necesarios para garantizar a los ciudadanos el ejercicio digno de este derecho, en el marco de libertades proclamadas por nuestra Constitución y en el desarrollo posterior de la legislación educativa. Son derechos y libertades:
  • La libertad de creación y dirección de centros educativos.
  • La libertad de elección de centros por parte de las familias.
  • La libertad en el desarrollo de la función docente, dentro del marco que ofrece el Carácter Propio de cada Centro.
  • El derecho a recibir una formación religiosa y moral conforme a las propias convicciones de los padres o, en su caso, de los alumnos.
  • El derecho de los diferentes miembros de la Comunidad Educativa a participar en el control y gestión de los Centros, conforme a la legislación vigente.
  • El derecho a la gratuidad que asegura el acceso a todos a la educación.
La Escuela, como lugar de educación, se propone ayudar a las familias a promover:
  • El pleno desarrollo de la personalidad de cada alumno mediante el enriquecimiento y la maduración de sus dimensiones corporal, psicológica, sociocultural y trascendente.
  • La progresiva autoestima y la capacidad de ser protagonistas y responsables del propio proceso educativo.
  • La adquisición de hábitos intelectuales, técnicas de trabajo y conocimientos científicos, técnicos, humanísticos, históricos y estéticos.
  • La capacitación para el ejercicio de actividades profesionales.
  • La formación en el respeto a los derechos y libertades fundamentales y en el ejercicio de la tolerancia y de la libertad dentro de los principios democráticos de convivencia y de pluralidad.
  • El desarrollo de actitudes que favorezcan la participación responsable, activa, crítica y creativa en la vida social.
  • La disposición para comprometerse personal y solidariamente en la construcción de una sociedad en la que sea posible la paz, la cooperación y la solidaridad entre los pueblos.
En definitiva, la Escuela ayudará a los alumnos a conseguir su madurez personal, a construir una sociedad más humana y un mundo más habitable.

EL CONTEXTO SOCIOCULTURAL DE NUESTRA ESCUELA

Nuestra Escuela y nuestra acción educativa se insertan en el entorno geográfico, social, cultural, político y eclesial de la comarca de Los Pedroches, de Pozoblanco en particular, para dar respuesta adecuada a las necesidades de los niños, adolescentes y jóvenes, que son nuestra razón de ser. Son diecisiete las poblaciones de donde proceden nuestros alumnos. Aunque la mayor parte son de Pozoblanco, en EP, ESO, PCPI y CFGM (especialmente en estos dos últimos) hay un buen grupo de jóvenes de otros pueblos de la comarca.
Por eso, nuestra Escuela en su acción educativa:
  • Asume como valor positivo la realidad intercultural de nuestra sociedad, cada vez mayor también en nuestra zona.
  • Ayuda a descubrir los rasgos propios de nuestra comunidad y los da a conocer.
  • Potencia los valores específicos de nuestra realidad comarcal y local, en un clima de integración y apertura a todos los pueblos y culturas.
  • Se inserta en nuestro contexto sociocultural, favoreciendo el aprendizaje y el uso de la lengua, las costumbres y la cultura del entorno, atenta siempre al dinamismo propio del mundo juvenil.
  • Favorece el conocimiento de los alumnos y sus familias de los elementos geográficos, históricos y sociales propios del entorno, para que se sientan también responsables de la construcción y de la vida de la comunidad a la que pertenecen.
  • Impulsa la participación en la misión de la Iglesia provincial y local.
Nos abrimos al entorno de la comarca de Los Pedroches como centro de animación, de servicios educativos y culturales, como lugar de encuentro para los niños y jóvenes. Nos situamos también dentro de los nuevos espacios virtuales y culturales.
Esta inserción en la realidad sociocultural de nuestra comunidad comarcal y local, y el servicio a sus gentes, quiere ser también expresión de nuestra identidad cristiana y de la vocación evangelizadora de nuestra Escuela.
Abierta al diálogo ecuménico e interreligioso, nuestra Escuela acoge a todos cuantos, respetando nuestra identidad, optan por nuestro modelo de educación.

NUESTRA ESCUELA SALESIANA ES ESCUELA CATÓLICA

Nuestra Escuela quiere cooperar con la sociedad al desarrollo integral de las personas desde el mensaje y los valores del Evangelio.
La acción educativa de nuestra Escuela, como Escuela católica que es, trata de:
  • Promover la formación integral de los alumnos de acuerdo con una concepción cristiana de la persona, de la vida y del mundo.
  • Promover una síntesis entre fe, cultura y vida.
  • Crear un ambiente que favorezca el testimonio y la acción evangelizadora de los creyentes.
  • Impartir la enseñanza religiosa escolar con programas académicos adecuados en su contenido y calidad.
  • Promover itinerarios de educación en la fe y otras actividades de celebración cristiana y de grupos para quienes así lo quieran y en un marco de libertad.
  • Orientar hacia la inserción y el compromiso en los movimientos y servicios eclesiales.
  • Colaborar con otras fuerzas sociales comprometidas en la construcción de una sociedad más humana y más justa, de manera especial con aquellas que forman parte de la Familia Salesiana.
En el desarrollo de la actividad educativa nuestra Escuela sigue las orientaciones y criterios pastorales de la Iglesia Diocesana de Córdoba.

PRINCIPIOS Y CRITERIOS DE LA ACCIÓN EDUCATIVA SALESIANA

Nuestra Escuela actualiza la experiencia educativa de Don Bosco y Madre Mazzarello. Convencidos de su valor y originalidad, ofertamos nuestra propuesta educativo-pastoral, cuyos principios y criterios de actuación son:
  • Es popular, libre y abierta a todos, dando preferencia a los más necesitados.
  • Cultiva un ambiente de familia, de modo que los jóvenes sientan la escuela como “su propia casa”.
  • Coloca al alumno en el centro del proceso educativo.
  • Cuida la personalización de la relación educativa mediante la presencia activa de los educadores entre los alumnos, participando e involucrándose con ellos.
  • Da preferencia a estudios, especializaciones y programas que responden a las necesidades de nuestra zona: Aulas de Apoyo a la Integración, Programas de Cualificación Profesional Inicial, Ciclos Formativos de Grado Medio.
  • Favorece la participación y la corresponsabilidad entre todos los miembros de la comunidad educativa, cuidando de manera especial la relación escuela-familia.
  • Facilita su relación con el entorno, poniendo a disposición locales y personas, proponiendo actividades abiertas a todos.
  • Promueve la solidaridad con los más necesitados y la colaboración con otras entidades que contribuyen a lograr su derecho a una vida más digna.
  • Armoniza el desarrollo humano y cristiano, “educa evangelizando y evangeliza educando”.

EL PROCESO EDUCATIVO EN NUESTRA ESCUELA

Nuestro Proyecto Educativo tiene como finalidad última la promoción integral humana y cristiana de los jóvenes: “Buenos cristianos y honrados ciudadanos.
A través del Proyecto Educativo nuestra escuela tiende a lograr la unidad de la acción educativa, a crear una conciencia de responsabilidad compartida en todos los miembros de la comunidad educativa, a ser punto de referencia para la mejora continua y la calidad de nuestra propuesta educativa.
La escuela es lugar privilegiado para la formación integral de la persona en todas sus dimensiones (educativo-cultural, evangelizadora-catequética, vocacional y asociativa), conforme a la visión humana y cristiana de la persona y de la vida.
En nuestra labor educativa, en el desarrollo de las dimensiones de la persona, tenemos presentes la edad, el nivel de personalización y socialización, las experiencias propias y el entorno familiar y social, pues todo ello condiciona el proceso de educación integral de nuestros alumnos.
  • Dimensión educativo-cultural: para lograr el desarrollo armónico de las diferentes capacidades de la persona (psicomotrices, afectivas, intelectuales, éticas y espirituales, desde la coeducación y la igualdad).
  • Dimensión evangelizadora-catequética: la evangelización de los jóvenes es la primera y fundamental finalidad de nuestra misión; acompañamos el crecimiento humano de nuestros alumnos y promovemos el desarrollo de la dimensión religiosa de la persona.
  • Dimensión vocacional: nuestro Proyecto Educativo tiene como centro a la persona, al joven, y con él favorecemos su plena realización, que ha de concretarse en el descubrimiento de su propia opción vocacional, en la formulación de su propio proyecto de vida.
  • Dimensión asociativa: la experiencia asociativa es una de las intuiciones pedagógicas más importantes, muy presente en la educación y evangelización salesianas; el trabajo en grupo, la creación de un ambiente de familia, la relación educativa, el acompañamiento personal… son ejes fundamentales de nuestra propuesta educativa.

RASGOS CARACTERÍSTICOS DE NUESTRA ESCUELA

Nuestra Escuela desarrolla su labor educativa con el espíritu y el método de Don Bosco, que se caracteriza por:
  • El criterio preventivo: aportación original de nuestro fundador a la acción educativa entre los jóvenes, este sistema se basa en tres pilares fundamentales: la razón, la religión y el amor.
  • Un ambiente educativo que favorece el protagonismo del joven, el trabajo, la alegría y la creatividad.
  • La relación educativa personal, el acompañamiento, la cercanía, la acogida y el diálogo.
  • La presencia-asistencia activa y animadora de los educadores entre los jóvenes.
  • La oferta respetuosa de una experiencia de fe y compromiso cristiano.
  • La formación integral más allá del horario lectivo: nuestra Escuela es una escuela a “tiempo pleno” que oferta actividades y servicios en función de los intereses y las capacidades de los miembros de la Comunidad Educativa.
  • La capacidad de ser Escuela abierta a su entorno para un mutuo enriquecimiento.
  • La promoción del diálogo y la integración entre la fe y la vida, entre la cultura y los valores evangélicos, iluminando los conocimientos humanos desde la experiencia de la fe.
  • La atención a la cultura de la comunicación, a las nuevas tecnologías, a la mundialización, para educar en la diversidad, la tolerancia, la interculturalidad, la acogida, el encuentro y la solidaridad.
  • Una metodología didáctica abierta y flexible, capaz de dar respuesta a la diversidad, de promover aprendizajes significativos e integrar avances pedagógicos y tecnológicos.
  • La preocupación y atención permanentes a los niveles de calidad en el servicio educativo de nuestra Escuela, que se concreta en un Plan de Mejora de la Calidad.