Queridos hijos e hijas, soy María. Y hoy 24, que es la fecha en la que soléis recordarme, siento la necesidad de acercarme yo a vosotros. Por ello, os pido que busquéis un lugar tranquilo en vuestra casa, que os coloquéis en una postura cómoda, que cerréis los ojos y que escuchéis mi voz.
La fiesta por el 205° aniversario del nacimiento de Don Bosco
Por ANS – Agencia de Noticias SalesianasEn la fiesta de Don Bosco, con motivo del aniversario de su nacimiento (16 de...